Eduardo Luka

Hace cinco años decidió cambiar completamente de rumbo. Comenzó a cantar canciones que llevaban años ocultas en una libreta y que pocos o nadie habían escuchado haciendo añicos el caparazón que le impedía mostrarse. Desde entonces se está haciendo músico, y también profesor. Ambos oficios requieren de la preparación de un espectáculo, ambos se han de subir al escenario ante públicos diferentes donde trasmiten su función y han de enamorar al espectador.

Ha ido tocando de escenario en escenario, con artistas como Ken Strinfellow, Mabü, Maren Ladson o Josh Rouse. Una de esas noches el técnico de sonido era Edu Baos de León Benavente, y es ahí donde se conocieron, tejiéndose la aventura primeriza de producir un disco. Se mudó una temporada veraniega a Casa Larga (Mozota) y desde El Cariño fueron trazando las canciones.

Desde la humildad, la autoproducción y la testarudez aragonesa saldrá este primer disco, un pistoletazo de salida con el que colarse en algunos oídos y que sirve como primer plato para todas las canciones que están por llegar.